Calefacción
Servicio de instalación, reparación y mantenimiento de los diferentes sistemas de calefacción en viviendas, comercios e industrias.
Instalación calefacción:
- Instalación de calefacción con radiadores de plancha, aluminio o acero inoxidable, con red de distribución de tuberías de polietileno o cobre empotradas o en superficie. Mandos inteligentes con termostatos modulantes con cable o WIFI.
- Instalación de radiadores eléctricos de bajo consumo mediante red eléctrica y mandos para gestión del consumo.
- Instalación de calefacción mediante suelo radiante con distribución por colectores y mandos zonificados.
- Instalación de equipos de aerotermia de bajo consumo con distribución del calor con fancoils o radiadores de alto rendimiento.
- Instalación de sistemas de control inteligente de temperaturas y de consumos.
- Reparación y mantenimiento de calderas de gas natural y de gasóleo (servicio multimarca).
Instalación de caldera:
- Instalaciones de calefacción con calderas mixtas de condensación a gas natural o gasóleo de última generación.
- Instalación de calderas de Biomasa utilizando combustibles naturales como pellets, huesos de aceitunas o residuos forestales.
Precio instalación calefacción:
Realizamos presupuestos a medida en función del proyecto y las necesidades de cada cliente.
- Instalación, reparación y mantenimiento de instalaciones de gas natural y propano en viviendas, comercios e industrias.
- Renovación y adecuación de instalaciones antiguas de gas natural en comunidades de vecinos.
- Sustitución de baterías antiguas de gas.
- Gestiones para legalización, altas y bajas de gas natural.
Desde Instal·lacions Itchart ofrecemos servicio de instalación, mantenimiento y reparación de sistemas de calefacción y gas en: Vilassar de mar, Vilassar de dalt, Cabrils, Cabrera, Mataró, Argentona, Premià de mar, Premià de dalt, Sant Andreu de Llavaneres, Sant Vicenç de Montalt y alrededores.
Calefacción y covid
Existen recomendaciones oficiales para optimizar los sistemas de climatización y evitar la transmisión de la COVID a través de las gotitas respiratorias de personas infectadas por los conductos de ventilación. Sin embargo estas recomendaciones están dirigidas a centros de salud. Podemos quedarnos con algunos consejos para aplicarlos en nuestros hogares y empresas, aunque la transmisión en este caso es mucho menos probable.
El aumento de la temperatura ambiental gracias a la calefacción no parece tener ningún efecto en el aumento de la transmisión del virus.
Como comentábamos, es muy poco probable que en un hogar se transmita el COVID a través de un sistema de bomba de calor. Algunas recomendaciones para estar más seguros serían desinfectar los filtros del aire con una solución de hipoclorito de sodio al 10%; implementar medidas de control de moho; y evitar fuentes de emisión adicionales como los humidificadores de vapor frío, las velas o ambientadores, o combustibles sólidos. Todo ello con el objetivo de evitar que el sistema HVAC transmita las gotitas respiratorias de personas infectadas a través del sistema de aire.
Calefacción
A la hora de decidirse por un sistema de calefacción o por otro, es necesario hacer un cálculo del coeficiente térmico para conocer la potencia necesaria. Esto se realiza cruzando el espacio a calentar (en m2), la orientación (dependiendo de si recibe más o menos luz solar), el aislamiento (ventanas y tabiques) y la zona climática. Además, hay que comprobar también la capacidad de los radiadores para disipar de forma óptima el calor generado.
En Itchart Clima nos encargamos de calcularlo para ofrecerte el sistema de calefacción que más se adapte a tus necesidades.
En Itchart Clima instalamos diferentes tipos de calefacción:
- Calefacción con gas – calderas de gas natural o propano
- Calefacción eléctrica: radiadores eléctricos, suelo radiante, toalleros secatoallas, termos ACS o bombas de calor
- Calefacción de biomasa: estufas de leña, de pellets o de policombustible
- Aerotermia
- Calefacción con calderas a gasóleo
Habitualmente se considera que la temperatura ideal dentro del hogar es de entre 20-21°C durante el día y 15-17°C de noche. No se recomienda poner la calefacción a más de 25ºC en invierno.
Depende de si lo importante para ti son las emisiones (por lo que los menos ecológicos serían los sistemas de combustión como pellets o biomasa) o la generación de electricidad/gas. Debemos encontrar el equilibrio entre el sistema más ecológico atendiendo a todas estas variables, pero que también sea suficiente para mantener una buena temperatura en el hogar y que sea también económico.
En casas grandes con climas fríos, se aconseja principalmente sistemas de calefacción con gas; en cambio, en hogares con menos superficie que calentar o con climas más cálidos, la calefacción eléctrica suele ser suficiente y más económica.
Es cierto que desde que, cuando el hogar está frío, la caldera gasta más energía hasta que consigue la temperatura de confort (más que en mantener esa temperatura). Instalar un termostato modulante puede ser interesante en estos casos, para mantener una temperatura no excesivamente alta y bajarla durante la noche. Pero si vamos a estar ausentes del hogar durante unas horas, es mejor dejarla apagada. Con un dispositivo inteligente, podremos programar que se encienda automáticamente antes de regresar a casa.
La pregunta del millón para muchos consumidores. Hay muchos factores a tener en cuenta a la hora de ahorrar en la factura del gas:
- Contar con un buen aislamiento en el hogar es básico (ventanas, tabiques, tuberías…)
- Mantenimiento del sistema de calefacción para evitar fugas: limpieza de quemadores, pruebas de monóxido, revisión de presiones… según la OCU, purgar los radiadores puede suponer un ahorro de energía del 10% anual (unos 80€/año).
- Tipo de contrato con la compañía de luz y gas: elegir una tarifa que se adapte a nuestras necesidades (tarifa fija o variable, tarifa del mercado libre vs. mercado regulado…) es lo que al final tendrá más incidencia en lo que pagamos en nuestra factura.
Sentido común: mantener las ventanas cerradas si tenemos la calefacción encendida para evitar la dispersión del calor, no dejar el agua caliente encendida durante excesivo tiempo (apostar por duchas cortas), regular la temperatura con un termostato… son todos consejos obvios que podemos aplicar en nuestros hogares para reducir la factura de la calefacción.
Calderas
Existen calderas de calefacción estanca, estancas de bajo NOX o calderas de condensación. El principal factor a la hora de elegir caldera es la ubicación del hogar:
- En grandes ciudades lo más económico y común son las calderas de gas natural por condensación, así como la calefacción eléctrica.
- En zonas rurales, es más común y ecológico apostar por sistemas de calderas de gasóleo, o sistemas de calefacción con biomasa (leña o pellets).
Hemos de tener en cuenta que según la nueva normativa europea de etiquetado y diseño ecológico, para nuevas instalaciones o renovaciones solo se pueden fabricar (y comprar) calderas de condensación, por lo que si se rompe tu caldera y debes cambiarla, se tendrá que instalar una nueva caldera de condensación de forma obligatoria. Además, algunas comunidades cuentan con planes renove para incentivar este cambio en los hogares y así conseguir que aumenten su eficiencia energética.
En Itchart Clima nos encargamos de calcularlo para ofrecerte el sistema de calefacción que más se adapte a tus necesidades.
Aunque una caldera de condensación nueva tiene un coste de adquisición más elevado, la condensación puede aportar un ahorro en la factura de gas de hasta el 30% respecto a una caldera tradicional, llegando hasta un 40% si se combina con radiadores de baja temperatura.
La instalación de calderas de gas es algo delicada. Por lo tanto, debe hacerla siempre personal autorizado, ya que implica diferentes variables:
- Ubicación del equipo (caldera física)
- Conexión con la red de suministro de agua y gas
- Programación y puesta en funcionamiento del aparato
Por lo tanto, si tienes que instalar un caldera o sustituir una vieja por una nueva, debes contactar con una empresa autorizada como IT Chart, o si no con tu distribuidora de gas natural (que suele contar con una red de empresas colaboradoras autorizadas para realizar estas operaciones).
Un presupuesto de instalación de caldera nueva debe incluir los siguientes aspectos:
- Desmontajey retirada de la caldera antigua
- Instalación de la nueva caldera
- Adecuación de las tomasde gas, calefacción y agua
- Tubo de extracción de humos
- Instalación de la salida de humos
- Tubo de desagüeal tratarse de una caldera de condensación
Esto es especialmente importante si se sustituye una caldera vieja por una nueva de condensación, ya que el proceso de instalación debe contemplar todas las medidas de seguridad.
Una caldera de condensación cuenta con diferentes conexiones en el equipo. Todas ellas son necesarias para su buen funcionamiento. Estas conexiones son las siguientes:
- Entrada de gas: conexión de la caldera con la red de gas. Esta conexión debe manipularla siempre personal cualificado y autorizado para ello como IT Chart
- Entrada de agua fría: conecta la caldera con la red de suministro de agua
- Salida agua caliente sanitaria: permite distribuir el agua caliente hacia la ducha y los grifos de la vivienda
- Salida de calefacción: es el tubo que conecta la caldera con el circuito de calefacción para distribuir el agua caliente por toda la casa.
- Retorno: esta salida conecta el circuito de calefacción con la caldera, en esta dirección, para que el agua regrese a la caldera, vuelva a calentarse y comience el ciclo de nuevo.
La salida de humos de las calderas puede ser de dos tipos:
- Concéntrica o de doble pared. Están compuestas por dos tubos, uno dentro de otro. Este doble tubo sirve para evacuar los gases combustionados y para proporcionar aire limpio a la caldera: los gases salen por el tubo interior y el espacio entre los tubos sirve para suministrar el aire limpio. Normalmente, las dimensiones de estos tubos en las calderas de condensación son 60 mm de diámetro para el interior y 100 mm para el exterior. La evacuación puede ser vertical u horizontal. En el caso de los edificios de nueva construcción siempre hacia la cubierta del edificio y en el caso de viviendas en las que se sustituye por una nueva la evacuación puede hacerse hacia la fachada del edificio.
- Doble flujo. Consiste en poner dos tubos independientes, uno para la salida de gases y otro para la entrada de aire limpio en la caldera. El diámetro de ambos, en este caso, es de 80 mm. Es válido para salidas de humo largas, por ejemplo, cuando desde un primer piso debemos evacuar los gases por la cubierta del edificio.
En las calderas convencionales (estancas), la salida de humos es metálica (habitualmente de aluminio). En cambio en las nuevas calderas de condensación, esta salida suele ser de PVC. Hay una longitud máxima de evacuación que indica el fabricante y que debe cumplirse para asegurar su correcto funcionamiento.
También es conveniente que la caldera de condensación esté cerca de un desagüe, para evacuar de forma sencilla los condensados que se producen durante su funcionamiento.
No. La salida de gases de las calderas de condensación en su interior incorporan un tubo de polipropileno para evitar el deterioro por oxidación. Además la inclinación de dicha salida es opuesta a cualquier caldera estanca o de bajo NOx.
Tras la colocación y conexión de la caldera, el profesional debe emitir un certificado en el que quede patente que la instalación se ha hecho correctamente y siguiendo la normativa contemplada en el RITE sobre equipos técnicos térmicos y caloríficos.
Este certificado debe renovarse con cada revisión de la caldera (obligatoria cada 2 años), y es imprescindible para que el equipo funcione con plenas condiciones de seguridad, por lo que la empresa suministradora de gas puede exigirlo en cualquier momento.
Además, tras la instalación, el Servicio Técnico Oficial de la marca debe realizar la puesta en marcha de la caldera, realizando los ajustes necesarios para obtener el máximo rendimiento. A partir de ese momento quedará a su vez validada la garantía de la caldera.
Aunque teóricamente se pueden seguir instalando calderas de bajo NOx (porque ya están en el mercado), con la entrada en vigor de la nueva normativa europea está prohibida la fabricación de calderas que no sean de condensación. A la práctica, lo cierto es que ya no se encuentran disponibles; por lo tanto, sería bastante difícil (o un golpe de suerte) poder instalar una caldera que NO sea de condensación actualmente.
Si instalas una nueva caldera podrías quitar las rejillas siempre y cuando no dispongas de ningún otro aparato a gas, como por ejemplo en los fogones.
Quizás hayas oído hablar de calderas de gasóleo, y en IT Chart también las comercializamos e instalamos. Este tipo de calderas generan un calor agradable y constante, y se recomiendan para la calefacción de espacios grandes (más de 30m2).
El principal problema de la caldera de pellets es cumplir con la normativa de salida de gases, por lo que habitualmente este tipo de instalación se reserva para casas unifamiliares o adosadas donde esta instalación es más sencilla. Sin embargo, se podría instalar también en pisos si se puede cumplir con esta normativa de forma segura.
Es obligatorio realizar una revisión cada dos años por una empresa autorizada, como IT Chart, que emita un certificado al respecto. Habitualmente esta revisión se incluye en el contrato de mantenimiento. Además de la revisión obligatoria, también puedes contratar mantenimiento de calderas a parte para hacer revisiones periódicas más frecuentes, así como la revisión de radiadores, bombas de calor y otros dispositivos de emisión de calor.
Termostatos
Los termostatos convencionales (tanto de rueda como digitales) pueden conectarse a las nuevas calderas de condensación. De todas formas has de tener presente que estos termostatos pueden interrumpir la modulación de la caldera, por lo que nuestra recomendación es actualizar también el termostato y sustituirlo por uno de la misma marca que la caldera. De esta forma, la comunicación es más fluida y consigue adaptarse a las necesidades reales, consiguiendo un importante ahorro de energía
En el termostato analógico la temperatura se selecciona a través de una rueda sin pantalla indicadora, mientras que el termostato digital cuenta con un display digital y se controla mediante botones.
No, aunque en una instalación doméstica es lo más habitual. También se puede instalar conectado a una válvula de zona o a la bomba circuladora, dependiendo siempre de las necesidades de la instalación.
En el termostato diario se selecciona una programación que se va repitiendo cada día mientras que en el semanal se puede optar por una programación diferente para cada día de la semana.
Los termostatos permiten regular la temperatura ambiente del hogar. De esta forma podemos evitar cambios bruscos de temperatura y mantener una temperatura agradable y estable durante todo el día. Los nuevos termostatos inteligentes pueden integrarse con los Smartphone, pudiendo programar así cuándo se enciende y se apaga la calefacción. De esta forma podemos controlar que por ejemplo los radiadores se enciendan 20 minutos antes de llegar a casa de trabajar, consiguiendo una temperatura óptima en todo momento.
Radiadores
Los radiadores pueden ser básicamente de tres materiales: aleación de aluminio, de acero o de hierro de fundición.
El aire en los radiadores es un efecto que se produce por la descomposición del agua en oxígeno e hidrógeno por causa de la electrólisis al circular por los radiadores. Las calderas incorporan un purgador automático que es capaz de soltar ese aire si pasa por la caldera. Pero a veces, sobre todo, en radiadores nuevos la cantidad que producen es muy alta y por el diseño de la instalación se queda en los radiadores lo que produce ruido e incluso puede llegar a dejar de calentar. Es entonces cuando tenemos que purgarlo.
De todas formas, se recomendaría purgar al menos una vez al inicio de la temporada de invierno los radiadores para mejorar el ahorro energético, incluso aunque el radiador caliente bien y no haga ruido alguno.
No, el agua de los radiadores a veces parece sucia pero no conviene cambiarla. Esa agua ya ha perdido todo el oxígeno disuelto por lo que tiene muy limitada el poder de oxidación. Si la cambiamos comenzaríamos el proceso oxidando partes interiores de los elementos de la calefacción así como la producción de aire y el consiguiente purgado.
Si esto sucede, debemos verificar que el radiador no tenga burbujas de aire. Para ello se recomienda llamar a un servicio técnico como IT Chart para hacer un mantenimiento adecuado, y así sacar el aire que haya podido quedar almacenado dentro de los radiadores.
Bombas de calor
Los sistemas de calefacción con bomba de calor tienen un parámetro específico denominado COP, que compara los kilovatios térmicos generados en la estancia con respecto a los kilovatios eléctricos consumidos por la máquina.
Este parámetro calcula consumo eléctrico, pero no está relacionado con el confort aportado por la máquina al ambiente. Habitualmente, en el caso de las bombas de calor este es muy deficiente debido a la modificación de la humedad relativa.
Calefacción eléctrica
Los radiadores eléctricos suelen estar fabricados en una aleación de aluminio que favorece la disipación del calor por medio de la convección natural del aire. Dicha aleación está optimizada, para que cada elemento disipe el calor de la manera más eficiente.
Los seca toallas eléctricos están fabricados con 3 elementos:
- El cuerpo del toallero está fabricado en acero, que le ofrece robustez e inercia durante la transmisión calor por radiación.
- El interior del toallero incorpora un fluido de transferencia térmica especialmente optimizado para la circulación por el interior de los tubos del toallero.
- Una resistencia eléctrica de alta calidad que transforma la energía eléctrica en calor.
Algunos emisores térmicos (toalleros eléctricos) están diseñados para estar colgados en la pared. Según la normativa UNE60335 de seguridad eléctrica que rige la fabricación de estos productos, se trata de “productos fijos” que deben ir obligatoriamente anclados a la pared. Además, la instalación de este tipo de sistemas lleva asociado un cálculo de necesidades. Este implica que cada producto se instala en una estancia con unos metros determinados y con unas perdidas caloríficas concretas. Moverlos a otras estancias con otros requerimientos térmicos limita su efectividad y eficiencia.
Los emisores térmicos son fáciles de instalar, no obstante se deben tener los conocimientos adecuados de calefacción para instalar correctamente los productos. Un mal dimensionamiento e instalación, pueden provocar que la calefacción no funcione correctamente y que el consumo a final de mes no sea el adecuado. Por eso siempre recomendamos que sea un experto en instalación y mantenimiento de sistemas de calefacción (como IT Chart) los que realicen esta instalación.
Los emisores y radiadores eléctricos se dimensionan en base a necesidades térmicas y en función de esto se obtiene la potencia a instalar. Por ejemplo, una vivienda media de 80m2 necesita aproximadamente unos 6 kW de potencia nominal, que si sectorizamos y programamos se puede reducir a la mitad. El mínimo de potencia a instalar en una vivienda con calefacción es de 5 kW según el C.T.E. (Código Técnico de la Edificación), por lo que no sería necesario modificar la instalación para la instalación de nuestro sistema. Pero sí, para cuando coincidan con la lavadora y/o lavavajillas.
El C.T.E. (Código Técnico de la Edificación) obliga a que una vivienda con calefacción tenga asociado un circuito específico para calefacción y una potencia mínima de 5,5 kW contratada. En el caso del ejemplo de una vivienda tipo de 80 m2, la potencia máxima a instalar sería de 7 kW, pero teniendo en cuenta el coeficiente de simultaneidad por sectorización de zonas, no sería necesario incrementar el término de potencia.
La potencia nominal es la capacidad máxima de calor que puede generar un radiador. Se mide en vatios (W). Algunos emisores térmicos durante su funcionamiento en régimen estacionario consumen solo un porcentaje de la potencia nominal denominada potencia efectiva y no el 100% de la potencia nominal.
El coeficiente de no consumo indica el porcentaje de energía no consumida durante el test de ensayo realizado en laboratorios independientes. Equivale a la potencia disponible que se obtiene de restar a la potencia efectiva la potencia nominal.
Actualmente todavía no existe normativa específica de clasificación energética para la calefacción eléctrica. Históricamente la calefacción eléctrica no ha sido tenida en cuenta a la hora de establecer clasificación energética. Este hecho está cambiando con la nueva directiva de diseño ecológico de productos, antesala de una legislación de clasificación energética para estos productos.
El consumo de energía está relacionado con el rendimiento de cada combustible. Esto no significa que la electricidad sea más cara que el gas, puesto que para mantener la temperatura en una vivienda, hace falta más cantidad de gas que de electricidad debido al menor poder calorífico del gas y las pérdidas de los sistemas de calefacción por caldera. En el fondo todo depende de la correcta instalación y utilización, tener un sistema de programación horaria y de sectorización. Y por supuesto, del tipo de tarifa contratada.